Virgen de las Mercedes, Madre y esperanza nuestra.
Caminantes
somos,
transportadores
de anhelos y esperanzas.
Nuestra
vida es un volante,
madrugadas
y silencios
bajo
el patrocinio
del
que llevó a hombros a Cristo, tu Hijo.
Esta
Hermandad de San Cristóbal,
de tu
querido pueblo de Herencia,
te
ofrece,
en esta
noche de pasión de Madre,
este
ramo
de
agradecimiento y de súplica.
Gracias
Madre, por tus tantas Mercedes
y te
suplicamos
que no
dejes nunca
de
guiarnos con tu mano.
Tú
eres el camino que nos lleva a Dios.
Danos,
Hermosona, tu bendición.
¡Viva la Virgen de las Mercedes!
Foto: Jose Antonio Fernandez-Baillo
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